Jimena Chango Chango, Criminologa y Jurista del https://laboratoriopericialforense.com/
Solicitar un visado de estudiante puede convertirse en una carrera de obstáculos. Aunque la ley establece plazos claros, la realidad suele ser distinta: citas consulares que nunca aparece disponibles, retrasos en la entrega de documentos universitarios o problemas técnicos que bloquean el proceso. Cuando estas situaciones no dependen de ti, hablamos de fuerza mayor. Aquí te damos algunas claves prácticas para manejarlo.
1. Principios que te respaldan
Más allá de artículos legales concretos, hay ideas generales que siguen vigentes y que puedes usar en tu favor:
• Derecho a la educación: está reconocido para todos, incluidos los estudiantes extranjeros. La Administración debe facilitarlo.
• Fuerza mayor: si algo imprevisible e inevitable te impide cumplir un plazo (como la falta de citas), puedes alegarlo.
• Buena administración: las instituciones tienen la obligación de no ponerte trabas innecesarias y de actuar con proporcionalidad.
2. Cómo reunir pruebas
La clave está en demostrar que no ha sido culpa tuya:
• Citas consulares: guarda capturas de pantalla con fecha y hora donde se vea claramente que no hay citas disponibles. Si quieres reforzar la prueba, incluso puedes levantar acta notarial.
• Retrasos de la universidad: conserva todos los correos o documentos donde tu centro reconozca que se demoró en enviarte la carta de admisión. Si no están en español, tradúcelos oficialmente.
• Registro personal: anota cada intento que hayas hecho para conseguir cita o pedir información. Mostrar tu constancia siempre ayuda.
3. Cómo plantear tu escrito
Cuando presentes alegaciones o pidas una solución excepcional:
• Cuenta la historia en orden: explica los hechos de manera clara, apoyándote en las pruebas.
• Apóyate en los principios: menciona la fuerza mayor y tu derecho a la educación, sin enredarte en artículos técnicos.
• Haz una petición concreta: por ejemplo, pedir una cita extraordinaria o que acepten tu solicitud por un canal alternativo.
4. Si te lo deniegan
No todo está perdido:
• Recurso administrativo: puedes reclamar que tu caso no fue bien valorado o que no hubo suficiente justificación en la denegación.
• Recurso judicial: en última instancia, llevarlo ante los tribunales.
Que un retraso ajeno a ti ponga en riesgo tu proyecto académico es injusto. Por eso es importante pasar de la simple queja a una argumentación clara y respaldada con pruebas. Con un expediente bien documentado y una petición bien planteada, aumentan mucho las probabilidades de que la Administración te dé una salida excepcional y no veas frustrado tu derecho a estudiar.